El pasado 22 de abril 2016, pasé la consulta bi-mensual en el Almenara y fue este día que mi Médico decide iniciar una disminución más de la dosis del corticoide, pasaré de 5 mg diarios a 2,5 mg ínter diarios. Los Lunes, Miércoles, Viernes, Domingo tomaré 2.5 mg de pretnisona, los Martes, Jueves y Sábado no tomaré corticoide.
Tengo la recomendación de mi Médico que puedo tener inflamación en las articulaciones, pero si desaparece en el transcurso de dos meses, entonces estaré listo para dejar de tomar corticoide.
He iniciado al día siguiente esta nueva dosis, los primeros 16 días no hay mayor diferencia en los síntomas, me siento igual, es decir, fuerza normal, sin cansancio, todo bien.
A partir del día 17, es decir, a partir del 2 de mayo podemos decir que cierto cansancio es notorio los días que no tomo el corticoide, me siento con el cuerpo entumecido desde el mediodía y va empeorando hasta la noche, sin llegar a ser algo incapacitante, solo es que necesito hacer estiramientos de los músculos de todo mi cuerpo para sentirme mejor. Eso si, sueño, tengo sueño, si puedo dormir temprano, lo hago, el fin de semana si pudiera dormir todo el día lo haría, pero hay compromisos así que no hay otra que participar y aguantar un poco el cansancio.
Conforme pasan los días, ya estando a partir del día 23 de mayo siento menos cansancio, mañana es martes 25, no me toca tomar corticoide, veremos como termino el día, parece que el cansancio va cediendo poco a poco.
Hoy noté mi dedo meñique de la mano izquierda, un poco inflamado, la articulación de la 2da falange con dolor a la presión, hoy apareció de pronto, pero es sólo una articulación, no pasa nada con el resto del cuerpo.
Mis músculos del cuello están más duros, me dificulta voltear a los lados sin dolor, para esto, una batería de estiramientos de cuello ayudan a mejorar el movimiento. No hay perdida de fuerza, todo bien en este sentido.
Veremos como transcurren los días siguientes, vamos en transición a dejar el corticoide y el camino tiene síntomas ligeros que demuestran que el cambio tiene sus "cosillas", que deberemos ir superando poco a poco como tantas otras veces en años anteriores que pasamos por una reducción de dosis.
Vamos con fe, que luego podremos decir "Estamos sin corticoide!", paso a paso, el camino lo iremos devorando, tranquilo, tranquilo, respirando profundo para relajar los músculos que en transición a dejar el corticoide vamos.
